Recientemente hemos llevado a cabo un proyecto de acompañamiento a una empresa pública en la mejora de sus procesos de selección de personal, con el objetivo de incorporar personas con talentos y valores afines a una organización del ámbito socio-sanitario.
Durante el programa hemos compartido con ellos los errores más comunes que cometen los reclutadores, pero también les hemos puesto en sobreaviso de los fallos que, a nuestro juicio, cometen los candidatos a la hora de afrontar el momento clave de la entrevista de selección”
¿Quieres conocer cuáles son? Los compartimos contigo:
– Falta de preparación de la entrevista. Mostrar desconocimiento de la empresa y/o el puesto probablemente te hará perder muchos puntos en el proceso de selección. Ten en cuenta que encontrar un buen trabajo es casi un trabajo en sí mismo así que ponle dedicación y perseverancia, de modo que puedas acudir a la entrevista con la información como ventaja.
– Cuidar la primera impresión. Aspectos como acudir con una imagen inadecuada o vestimenta incorrecta, llegar tarde injustificadamente o incluso errores más graves como mostrar falta de educación, descuidar el lenguaje, la postura y la comunicación no verbal son circunstancias que te lo pondrán realmente difícil para continuar en el proceso de selección. ¡Recuerda tener el móvil en silencio!
– Falta de ética. Mentir o falsear datos del CV no beneficia al candidato ni mucho menos a la empresa, y en caso de descubrirse la falsedad se cerrarán unas puertas que son realmente difíciles de volver a abrir. Además, tampoco es nada recomendable exagerar algunas de nuestras cualidades, ya que los procesos de selección actuales “van a fondo” y pretenden extraer el máximo de información posible. Por supuesto hay que ser respetuoso con los anteriores trabajos y cuidarse de revelar información claramente confidencial de puestos anteriores.
– Mostrar falta de interés. No es bueno actuar sólo de manera reactiva y no interactuar con el entrevistador. Tampoco hay que decir únicamente lo que el entrevistador espera oír o decir a todo que sí sin pensar. La entrevista es un momento para mostrarse, así que evita contestar con monosílabos o eludir las preguntas que se te hacen. Recuerda, tan importante como hablar es escuchar.
– Demostrar inseguridad. Mostrar desconocimiento de las propias cualidades y del currículum o divagar, es otra muestra de falta de interés -o peor aun, de veracidad- que puede descartarte para un puesto realmente interesante. Si lo precisas, practica la entrevista con algún conocido.
Te animamos a compartir esta entrada con aquellas personas de tu entorno que vayan a afrontar próximamente una entrevista. Nosotros lo hemos hecho y la guía funciona!