Como consultores estamos acostumbrados a movernos mucho por diferentes empresas y sectores y nos llama la atención que, a día de hoy, todavía haya responsables que comentan que hay una falta de civismo generalizada. Empresas en donde se consienten las malas contestaciones, las conductas individualistas y otro tipo de comportamientos que perjudican a las personas y afectan al clima de la organización.
En la era de la felicidad del trabajador, queremos subrayar la necesidad de volver a los básicos y de sentar bases sólidas de trato humano. Pero ojo, no basta con dictar un decálogo desde arriba, el código cívico tiene que ser una construcción colectiva para que las personas se responsabilicen del mismo.
Esta semana estamos acompañando a un despacho con un equipo de 15 personas para construir su código cívico. Queremos compartir con vosotros los 6 pasos básicos que se requieren para convertir el civismo en la norma del equipo.