Con la vuelta al cole, también hemos vuelto al programa de liderazgo de Esment. En nuestro tercer año, esta completa propuesta nos permite profundizar en diferentes herramientas con las que pueden trabajar los responsables de equipo.
En concreto, este año nos hemos centrado en herramientas de comunicación para poder tener conversaciones más influyentes, con impacto humano, y que ayuden a un mejor desempeño y bienestar de las personas. El pasado mes de mayo, escogimos el modelo de Comunicación No Violenta para conversaciones difíciles. Un modelo que trabaja mucho con las emociones y las necesidades propias y del otro y que nos enseña a hablar desde el yo.
Con la entrada del otoño, hemos querido centrarnos en una herramienta totalmente diferente: la Sinceridad Radical, de Kim Scott. Según este modelo de comunicación, tenemos que encontrar el equilibrio entre cuidar a la persona y retarla. Lo interesante es el manejo de ese reto por parte del interlocutor, ya que es indispensable la generación de cierta incomodidad en la persona para que suponga una llamada a la acción. Para ello, debemos ser brutalmente honestos, siempre desde el cuidado, y no sabéis lo difícil que puede resultar ser sinceros. ¿En qué momento hemos desaprendido a decir la verdad y poder hablar las cosas?
Y, con honestidad, las sesiones de debate y reflexión con las cartas boca arriba resultan de lo más saludables, mental y empresarialmente.
