Vuelve la Navidad y, con ella, todas sus rutinas: estar presente en el momento de la encendida de luces, resistirse a comprar el primer turrón, desempolvar las cajas de adornos… y pensar qué me voy a poner para el día que celebremos la Navidad en la empresa. Porque, como viene siendo tradición, covid mediante, este año también nos juntaremos en Navidad.

Volveremos a encontrarnos con los compañeros, el jefe nos deleitará con su discurso y también lo hará algún empleado cuando lleve una o dos copas de más. Nos reiremos, criticaremos el funcionamiento del mundo, de aquel día en que no supimos cómo lidiar con aquello… Más o menos, lo mismo de siempre.

Pero, ¿y si no fuera lo mismo de siempre?

Estos son cinco motivos por los que olvidarte de todo lo que has hecho hasta ahora en Navidad en tu empresa

1Nos gusta tener grupos de amigos

Prepara momentos y situaciones en las que los empleados hablen como si no fueran compañeros de trabajo, solo personas.

2¿Amigos invisibles? ¿En serio?

Mucho mejor es compartir todo lo conseguido y lo que está por llegar. Ilusiónalos con mañana.

3A nadie le amarga un dulce

Y mucho menos un aplauso. Hazlo público. Aplaude y silba. Los bolígrafos los usa cada día, no necesita uno nuevo.

4Reír es una gran terapia

De uno mismo sobre todo. Diviértete y demuéstralo. Sienta de miedo.

5El jefe es sólo uno más del equipo

¿Serás capaz de que alguien te vea como una persona más y no solo como la responsable? Déjales ser y sé con el grupo.

Nosotros tenemos un montón de ideas para poner todos estos en práctica. ¿Quieres que te las contemos? Contáctanos para lo que necesites.