En 2015, la ONU aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible, una oportunidad para que los países y sus sociedades emprendan un nuevo camino que mejore nuestras vidas, sin dejar a nadie atrás.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definen prioridades de desarrollo sostenible a nivel mundial y las aspiraciones para el 2030, y buscan movilizar los esfuerzos a nivel global entorno a un conjunto de objetivos y metas comunes.
La Agenda cuenta con 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, que incluyen desde la eliminación de la pobreza hasta el combate al cambio climático, la educación, la igualdad de la mujer, la defensa del medio ambiente o el diseño de nuestras ciudades.
Los ODS hacen un llamado a la acción entre gobiernos, empresas y sociedad civil, para poner fin a la pobreza y crear una vida digna y de oportunidades para todos, dentro de los límites del planeta.
¿Por qué los ODS deberían ser importantes para las empresas?
Varios son los motivos que la propia ONU nos remarca:
- Mejorar la gobernanza (la forma de gestionar) y la transparencia.
- Mejorar el actual desempeño, los impactos en el entorno y el ahorro la empresa.
- Involucrar a los empleados en un proyecto común: contribuir al desarrollo local y global.
- Mejorar la imagen y la reputación externa de la empresa, posicionándose como una organización responsable ante sus clientes, administración y demás grupos de interés.
- En el caso de las pymes, ser pioneras en sostenibilidad.
- Descubrir posibles oportunidades de negocio.
A estos argumentos sumamos la visión del experto en sostenibilidad Antonio Vives:
“Una empresa no debe apostar por el desarrollo sostenible porque le salga rentable (que le sale rentable), sino porque la sociedad lo demanda, y además es lo correcto”. Es, en definitiva, una obligación moral.
En el mundo del trabajo y la gestión responsable de personas, varios son los ODS directa o indirectamente implicados, destacando el ODS 8: trabajo decente y crecimiento económico, y el ODS 5: igualdad de género.
Si bien estos ODS pretenden “poner a cero” algunos indicadores de suma gravedad, como el número de trabajadores en pobreza extrema, o el trabajo forzoso, desde la vieja Europa debemos ser consecuentes con los privilegios de nuestras condiciones laborales si los comparamos con los de los países en desarrollo. Qué duda cabe que en occidente sufrimos de precariedad laboral, severas desigualdades o alto desempleo, pero aun así nuestro paradigma es bien diferente.
Debemos adoptar una perspectiva humanista: considerar de forma plena el valor de las personas en las organizaciones. Nuestra obligación aquí debería ser ofrecer entornos de trabajo estimulantes y motivadores.
10 principios de las organizaciones comprometidas con las personas
La Fundació Factor Humà, entidad de referencia en gestión de personas, comparte un decálogo de principios de las organizaciones comprometidas con las personas.
- La persona como valor.
- Ética y buen gobierno.
- Igualdad de oportunidades y diversidad.
- Desarrollo y empleabilidad.
- Transparencia, comunicación y participación.
- Seguridad, salud y bienestar físico y emocional.
- Retribución equitativa y justa.
- Flexibilidad y equilibrio en las esferas vitales.
- Corresponsabilidad en las relaciones laborales.
- Innovación y creatividad.
¿Cómo evaluar mis progresos en gestión responsable de personas?
La propia FFH ha desarrollado una herramienta llamada Barómetro de Factor Humano.
El Barómetro es una herramienta de autoevaluación (y benchmark) que orienta a la empresa en los principios descritos, y acaba facilitando un mix de resultados que cuantifican aquello que a veces es invisible pero que todas y todos tenemos claro que impacta directamente en el negocio: el bienestar de las personas que lo hacen posible.
De todos estos temas estuvimos conversando en el webinar “ODS y gestión de personas” organizado por el IDI y Eticentre y que facilitó Jorge Serrano, socio de Go Consulting, miembro de la junta directiva de Eticentre y autor de este post.
Y tú, como organización, ¿por qué pondrías a las personas en el centro: por convicción o por interés?